Semejantes a Dios en el dar

SEMEJANTES A DIOS EN EL DAR

No te niegues a hacer el bien a quien es debido, Cuando tuvieres poder para hacerlo.  No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, Y mañana te daré, Cuando tienes contigo qué darle. Proverbios 3:27-28 (RV 1960)

¿Será que la actitud que tengamos hacia el dar es imperativa para llegar al éxito? ¿Será que tiene razón Pablo cuando dice que es mejor dar que recibir?  Hechos 20:35 (RV 1960)

Fuimos hechos a la imagen de Dios y a su semejanza.

Quiere decir que nos parecemos a Él en su carácter y en su forma de ser; es por eso que aunque no lo entendamos muy bien, sentimos plenitud cuando hacemos un acto de generosidad o nobleza, y nuestra conciencia nos reprende cuando actuamos mezquinamente o nos aprovechamos de alguien.

Nos sentimos mejor cuando damos un “aventoncito” que cuando pedimos uno, cuando damos una ofrenda que cuando estamos suplicando que nos ayuden con dinero.

Porque la naturaleza de nuestro Padre celestial es dar y nosotros estamos hechos para parecernos a Él. Ahora tiene sentido la parte de la Biblia que dice que nos amó de tal manera que “ha dado su único hijo para que todo aquel que en Él cree, no se pierda”.  Juan 3:16 (RV 1960)

Busquemos este día una oportunidad para dar según nuestras fuerzas. Te sorprenderás de la cantidad de formas que encontrarás para “regresar o aportar algo” a este mundo.

Te recuerdo también que si haces esto con una buena actitud y con las motivaciones correctas, estarás activando la ley de la siembra y la cosecha. Prepárate para recibir la cosecha de las semillas que has ido sembrando cada día, porque “todo” lo que el hombre (o la mujer) siembra, eso también cosechará. Gálatas 6:7 (Reina-Valera 1960)

Piénsalo:

¿Qué puedes hacer este día para devolver o dar algo a los que te rodean?
¿Qué ha producido en tiel haber ayudado a alguien que lo necesitaba.